La espléndida banda de Metal Sueca Opeth volvió a tierras mexicanas para dar un emblemático show en el escenario del Auditorio BB que nos hizo vibrar después de su última presentación en nuestro país hace ya 7 años.
El show comenzó perfecta y exquisitamente puntual a las 9:00, y sin ningún telonero. Los miembros de la banda Mikael Åkerfeldet (voz y guitarra) Martín Méndez (bajista), Fredrik Akesson (guitarrista), Joakim Svalberg (en los sintetizadores) y Waltteri Väyrynen (quien se integra como su nuevo baterista), dieron inicio con la canción “Ghost of Perdition” deleitándonos como siempre con un sonido completamente limpio y bien ecualizado.
Como parte de la celebración de 30 años de trayectoria, la banda creó este tour en el que han presentado canciones de sus diversos materiales, haciendo así del setlist de esta noche algo inolvidable.
El juego de luces, las poderosas voces y el insuperable sonido de los instrumentos fue completamente envolvente en la interpretación de todas las, canciones, dentro del setlist general presentaron:
- Ghost of Perdition
- Demon of the Fall
- Eternal Rains Will Come
- Under The Weeping Moon
- Windowpane
- Harvest
- Black Rose Immortal
- Burden
- The Moor
- The Devil’s Orchard
- Allting tar Slut
- Sorceress
- Deliverance
Siendo “Windowpane”, “Burden”, “The Moor” y “The Devil’s Orchard” algunas de las favoritas para muchos, y “Under The Weeping Moon” una de las sorpresas más agradables de la noche, ya que no es una canción que se escuche habitualmente debido a que es perteneciente a su primer álbum (1995).
Durante el show presentaron “Windowpane” y “Harvest” que son dos piezas que de forma muy especial Mikael, compartió como fue escribirlas en compañía de Steven Wilson (mayormente conocido por ser voz de Porcupine Tree).
Durante la presentación las emociones, la intensidad, la profunda melancolía de algunas de las canciones, y la maravillosa y armónica sensación entre esa perfecta sincronía entre un ritmo progresivo y death metal la noche fue más que maravillosa, sin olvidar mencionar que fue un momento muy especial para Joakim Svalberg, quien estaba cumpliendo esa noche 54 años; la gente cantó por su cumpleaños “Happy Birthday” y las tradicionales Mañanitas, y la banda cantó en sueco también para celebrar.
Tras dar cierre al tour con la presentación en nuestro país, esperamos desde ya con gran deseo poder escucharlos de nuevo próximamente y porque no, nueva música para seguir manteniendo viva la llama del rock y el death metal.
¡Sin duda un evento inolvidable!
