Chrissie Hynde es mucho más que la líder de The Pretenders: es un ícono que ha desafiado las convenciones del rock desde finales de los años 70. En una época en la que pocas mujeres ocupaban los reflectores en la escena punk y post-punk británica, Hynde se abrió camino con una mezcla de actitud feroz, letras honestas y una presencia escénica inconfundible.
Originaria de Akron, Ohio, Chrissie se mudó a Londres en los años 70 buscando un entorno musical más afín a su sensibilidad. Ahí trabajó como periodista para la revista NME, pero rápidamente se involucró en la escena punk emergente. Antes de formar The Pretenders, estuvo cerca de unirse a bandas como The Clash y The Damned, pero su destino estaba claro: debía liderar su propio proyecto.
The Pretenders nació en 1978 y, con su álbum debut homónimo en 1980, Hynde dejó claro que había llegado para quedarse. Canciones como “Brass in Pocket” o “Precious” combinaban la crudeza del punk con una sensibilidad melódica más accesible. La mezcla era irresistible, y su figura —independiente, audaz, sincera— se volvió una inspiración para generaciones posteriores de mujeres en el rock.
A lo largo de los años, la banda sufrió múltiples cambios de alineación, pero Chrissie Hynde se mantuvo como su corazón y cerebro. Su carrera ha tenido momentos brillantes y difíciles —como la trágica muerte de dos miembros fundadores en los 80—, pero siempre ha demostrado una impresionante capacidad de reinvención.
Hoy, con más de cuatro décadas en activo y un nuevo disco bajo el brazo, Relentless (2023), Chrissie sigue demostrando por qué es una de las figuras más respetadas del rock. Su presencia en México este 7 de mayo es una oportunidad única para ver a una leyenda viva en acción.
