La noche del 10 de febrero pasado, con lleno total, el Domo de Cobre fue escenario de una presentación en la que los asistentes se fundieron en uno con LP y su banda, quienes ofrecieron una noche de rock pop en un ambiente cargado de luz y sonido electrizantes que dejó a todos extasiados.
En punto de las 21:10 de la noche, como estaba prometido, LP salió al escenario tocando las primeras notas de Golden y el público se volvió loco. El ambiente rápidamente se tornó vibrante, y desde ese momento, jamás bajó su energía.
Con un poderoso y emotivo setlist, curado para no dejar apagar el ánimo un segundo, LP llevó a su gente a través de un apasionado viaje musical conformado mayormente por los mejores temas de su nuevo álbum Love Lines y algunas otras de sus conocidas joyas interpretadas con esa voz única.
Dentro de los temas que más furor causaron se encontraron: Love song, Everybody’s falling in love, Love Lines, The one that you love, One like You, Special, y siendo de las más aclamadas las legendarias When we’re high e Into the Wild.
El momento estelar de la noche, como era de esperarse, se lo llevó Lost on you, que el público no dudó en corear al unísono hasta el distintivo silbido de LP, que dicho sea de paso, en el segundo verso lo cambió por un chiflido de los que echamos mano los mexicanos para llamar la atención de aquel que se encuentra al otro lado de la calle; en ese momento la asistencia se unió en un grito ensordecedor haciendo vibrar el recinto.
El instante emotivo de la noche corrió a cargo de Recovery, unos de los temas de amor favoritos de su público, durante el que se pudo observar no poca gente abrazada, tanto entre ellos, como a sus recuerdos.
Long goodbye fue el tema con el que se despidió, y después regresó al escenario para cantar un encore de tres canciones más, entre ellas Tightrope, durante la que recibió un listón rojo de parte de una persona de la audiencia que sirvió como símbolo del tema que figura para le gente como un favorito de su repertorio.
Humilde, rebelde, divertide, agradecide. La energía con la que se entregó e interactuó con el público mexicano fue extraordinaria. Sin lugar a dudas una noche especial para sus seguidores en la que LP no quedó a deber nada, y una actuación en vivo que refleja su talento y su amor por la música y los escenarios.
Reseña: Heku