“Dirt Femme” es después de mucho tiempo y sin duda, el primer lanzamiento de Tove Lo como artista independiente, en el que da apertura a una sexualidad más explicita y es a su vez un tributo a todas las cosas que definen su propia feminidad.
Aunque este album, a diferencia de los anteriores es algo que podrías escuchar en la sala de tu casa con personas de diferentes generaciones, unas más abiertas que otras, también posee un tono complejo pero que a su vez se siente familiar.
En álbumes anteriores Tove Lo supero muchas expectativas y a su vez, superó muchos límites incluso en moral e imagen consiguiendo que Universal hiciera realidad algunos de su deseos más excéntricos no sólo en letras y sonido, sino también en la imagen de los álbumes y materiales visuales.
Ahora que Lo posee un aparente control creativo total, con letras más explicitas y explotando sonidos más electrónicos, así como fusiones y mixes más profundos respecto a sus materiales anteriores, podemos decir que esta nueva etapa nos presenta a una versión de Tove más genuina y libre.
Su cambio comenzó a mediados del año 2020 cuando se casó con el productor Charlie Twaddle, y nos mostró un album distinto que deja de lado el romanticismo tradicionalista de ser una mujer casada, y al anunciar el album Dirt Femme, en sus propias palabra explica: “Soy una mujer pansexual casada con un hombre heterosexual”.
Muchas de las canciones de Tove Lo están en un proceso de lucha en el que busca reforzar su propia identidad, en donde podemos apreciar como le canta al amor desde su perspectiva su visión diciendo “Eres el amor de mi vida, pero no puedo ser tu esposa de Stepford (que se define como robótica o automática, sinónimo de la esposa perfecta)” integrando un poco de esencia a lo Soft Cell.
Dentro del álbum tenemos también una latente preocupación de ser borrada por Hollywood en “Attention Whore”, así como un poco sobre los trastornos alimentarios, lo cuál retrata en el sencillo “Grapefruit”; pero en general, dedica la mayor parte de los versos del disco a a eliminar esa seriedad pesimista.
No es novedad para nadie el ver a Tove Lo en un tono sexual, o que incita a lo explícito pues jamás ha tenido conflictos con ello y no existen tapujos a la hora de expresarse, además del drama de experimentar esa eterna apuesta de estar entre la vida y la muerte.
La integración de synth-pop nos da un viaje al retro futurismo, incluso la imagen misma nos remonta un poco a la épocas de Jane Fonda en Barbarella, en donde podemos sentir una imagen de poder femenino, sensualidad, control y sobre todo, un viaje musical y virtual hacia un futuro incluso post-apocalíptico.
En uno de los primeros sencillos presentados por la cantante, “No One Dies From Love”, hace una reflexión sobre cómo es el querer/amar, y que pasa cuando son los primeros en amarse, dentro de esta canción particularmente, un efecto elimina la seriedad dentro de los versos del coro, integrando un sonido que altera un poco, haciéndonos bailar y eliminando un poco ese trámite forzado de formalidad en el amor demasiado tradicional.
Para “True Romance”, podemos decir que escribe una oda que resta fantasía y magia a Bonnie y Clyde, haciéndolos ver incluso aburridos. Lo ofrece en este material letras que nos invitan a vivir al límite, a morir de amor y por amor, esforzándose a todo volumen y viviendo al máximo aún en tensión, haciendo que el amor se sienta vivo y más real.
Dentro de las colaboraciones de este material tenemos la participación de First Aid Kit en “Cute & Cruel”, a SG Lewis en “Call on Me” y “Pineapple Slice”, y por último a Channel Tres en “Attention Whore”.
Es un disco lleno de subidas y bajadas emocionales que retrata de forma más real y natural como vivimos el amor, integrando incluso algunos temas más profundos que nos hacen sentir incluso letárgicos o sin ganas de levantarse a vivir un romance, dejándonos ver que incluso en el amor se valen la vulnerabilidad y el no querer hacer todos los días un esfuerzo por sacarlo a flote.
No te pierdas este álbum, te invitamos a salir de tu zona de confort con Tove Lo dejando un poco de lado sus éxitos más icónicos para conocer una nueva versión de la cantante sueca, y acercarnos a una nueva visión realista del amor que no muchos se atreven a compartir o a expresar.
Reseña:
Barbie Mntr
