
El pasado 12 de junio, MISSIO hizo literalmente vibrar al Foro Indie Rocks! con un show electrizante y enérgico en el que la música, las luces y la total conexión con el público nos dieron un momento inolvidable y apasionante en dónde pudimos cantar, bailar, saltar y hasta ser parte del mosh pit, haciendo temblar al recinto con un show que esperamos revivir pronto en muy poco tiempo, en este bonito país que sin titubear, Matt y David dijeron que es su favorito.
Hace algunas semanas pudimos conversar en privado con Matthew y David de MISSIO (Entrevista completa aquí), quienes nos contaron detalles de como sería su show en el Foro IR! y aunque sabíamos que sería enérgico y adictivo, las palabras en esa entrevista no fueron suficientes para describir el gran show y la gran noche que nos darían en el escenario de la Sala B.
Un jueves especial en el que la CDMX se sentía relajada y sin complicaciones, en un momento de extraña paz antes de que comenzara a llover, con poco tráfico, todo el universo conspiró a nuestro favor para llegar al show puntuales y listos para disfrutar lo que estaba por suceder. Para comenzar a llenar de energía al público, que no puso ninguna resistencia y se entregó por completo no sólo a MISSIO sino también a la banda abridora.
Los encargados de abrir la noche en el escenario de la Sala B, fueron la banda mexicana SINO, un proyecto que para quienes ya los conocen, es sin duda una de esas bandas independientes y emergentes cargadas de mucha buena energía y talento que da gusto escuchar en vivo y en playlists, y para quienes no los conocían, fueron una muy agradable sorpresa en la que pudieron descubrir una banda local cargada de talento que llega para quedarse contigo, y que naturalmente quieres seguir descubriendo y escuchando.
Con un toque bastante grovvy y refrescante en la que un sutil rock psicodélico se entrelaza con el funk y el indie, dándonos una propuesta alternativa con un sabor setentero que se siente bastante adictiva y que conecta muy rápido con el público. La energía del banda en el escenario fue una joya total, y pudimos bailar, cantar y sentir, con bastante pasión, canciones como “Antagonista”, “Penumbra” e “Insidia”, entre muchas otras más de este joven proyecto. (Aquí te compartimos un poco de su música).



A las 9:00pm en punto, con un público enérgico y ansioso, recibimos en el escenario de forma puntual a MISSIO, listos para darnos una noche brutal, cargada de buena música y una conexión maravillosa entre la banda y el público, en dónde además de darnos un gran show, Matthew nos regaló también muchos momentos de charla e introspección en la que abordó temas como la vida, el trabajo, las relaciones y por supuesto la salud mental, además de mucha buena vibra y una profunda calidez con la que expresó su gran amor y admiración por México y su público.
Dando inicio a la primera parte de la noche, entre luces naranjas y verdes, comenzó a resonar un intro con aullidos de lobo que dieron paso a “Wolves”, seguido por la enérgica y apasionante canción que nos vuelve indudablemente rebeldes “Fuck It”; equilibrando el ritmo entre furia, tristeza, alegría, rebeldía, enojo y hasta nostalgia y empatía, sonaron otros temazos como “I Don’t Even Care About You”, “Vagabond”, “Rad Drugz”, seguido por un himno especial en el que Matt nos recordó que nunca estamos solos, y que aunque a veces nos sentimos solos o invisibles, nunca olviden que ellos y su música, siempre te ven y están contigo para abrazarte con la canción “I See You”.
Tiñendo el ambiente con una luz ámbar que nos hizo sentir en casa, como en un recuerdo cálido, sonó ese adictivo riff que me eriza la piel y que enmarca el inicio de la que es una de mis grandes favoritas de MISSIO, “Good Vibrations”, seguida por otro hitazo que es bastante profundo emotivo, y que naturalmente se siente refrescante, nostálgico y azul… “Bottom of the Deep Blue Sea”, que aunque el público cantó de inicio a fin de forma religiosa cada canción, este es uno de los hits que cantaron con mucha más pasión. Y aunque dentro del setlist de la noche no sonó “Dizzy” que es otra de mis favoritas, con escuchar específicamente estas 2 canciones, la noche se sintió perfecta.
Para la segunda parte de la noche, tras ese momento suave, emotivo y nostálgico, la noche se puso un poco más fuerte, y llegaron temazos como “Fall Into a Black Hole”, “Villain” y “Sing To Me” en la que el público se dividió para comenzar un potente mosh pit que hizo literalmente que el suelo del recinto vibrara. Acercándonos al final, que no queríamos que llegara, pero que es lamentablemente inminente, pudimos disfrutar de “Killing Darth Vader With My Mother Fucking Kick Drum”, en dónde un solo musical que se sintió más industrial y electrónico, nos pusieron a brincar y bailar más de la cuenta, dando así paso a las últimas 2 canciones de la noche, “Everybody Gets High”, y para cerrar con broche de oro, una de las más icónicas de MISSIO, “Twisted”, que tiño al recinto en una potente luz que iba del rojo al naranja, y que al final, se apagó por completo para dejar a la multitud un momento a oscuras mientras la banda se desvanecía entre aplausos y gritos.
Con una noche que se sintió como un éxito total, con un público fiel que conocía a la perfección las letras de las canciones, las cuáles cantó de inicio a fin como himnos; y con una energía total en la que jamás se dejó de brincar, bailar, aplaudir o incluso juntar las manos para rezar, el show que vivimos fue espectacular y esperando desde ya, impacientes por que MISSIO vuelva a México para poder disfrutar nuevamente de la catarsis que se vive junto a este talentoso dúo.
Sin duda, ver que MISSIO estará en vivo es sinónimo de que vivirás una noche apasionante y es uno de esos shows imperdibles, que a pesar del poco tiempo que tiene la banda como tal y de que en nuestro país son ligeramente emergentes, no debes dejar pasar la oportunidad de estar en uno de sus shows. Si te lo perdiste, aquí te dejamos música para que disfrutes de MISSIO… y si quieres revivir esa apasionante noche, aquí están las canciones que tanto nos gustan.
Reseña: Barbie Monter | Fotografía: Pablo Villeda + Noemi Hernández






